No tenemos lector@s y por eso
estamos a salvo de las tentaciones del mundo.
Cerrad, por favor, las puertas
de la poesía.
Que no nos vean los enemigos.
En la línea del horizonte somos
un diminuto punto
invisible
de silencio.
Somos un erizo
que sabe protegerse.
El cambio climático podrá
destruir el mundo, pero
l@s poetas siempre
estamos a salvo.
Sobrevivimos.
Sobrevivimos.
S
o
b
r
e
v
i
v
i
m
o
s